PSORIASIS… ¿QUE HAY DE NUEVO?

La psoriasis es una enfermedad inflamatoria y crónica de la piel, que ocasionalmente también afecta a las articulaciones, y que provoca enrojecimiento, descamación, dolor e hinchazón. Puede manifestarse con diferente intensidad a lo largo de la vida y no es contagiosa.
Se calcula que en España el 2 % de la población sufre la enfermedad y, aunque se ha avanzado mucho en su conocimiento, es imprescindible continuar con las investigaciones para acercarnos cada día un poquito más. Sigue siendo a día de hoy una enfermedad crónica sin cura definitiva, donde los tratamientos médicos se limitan a frenar el proceso de avance, hacer más llevaderos los síntomas y lograr cada vez periodos más largos de remisión.

Por otra parte, la variada localización y los diversos tipos de psoriasis, sin olvidar la propia actitud de los pacientes, hacen que resulte ineludible una personalización en los tratamientos.
El protagonismo de esta afección está más que justificado. No solo la padeces tu, también la sufren tus familiares y pareja ya que las lesiones psicológicas provocadas por la psoriasis vienen a ser, en ocasiones, más graves que las propias escamas en tu piel.
En el resto de las personas el recambio celular de la epidermis dura 30 días. Sin embargo, en tu caso, este proceso se ve acortado llegando a producirse en cuatro días. Este hecho provoca que las células se acumulen en la superficie originando placas de piel gruesa, descamada y rojiza que te producen picor o dolor.
Aún se desconoce el origen concreto de la enfermedad aunque las últimas investigaciones parecen demostrar el papel de una bacteria el «Streptococo Pyogenes» en la aparición de un tipo de Psoriasis, la «Guttata».
También se sabe que es una enfermedad hereditaria. Sin embargo, no por el hecho de tener la enfermedad, tus hijos van a serlo. Además puede ocurrir que se herede la alteración genética, pero no se desarrolle la enfermedad, porque también intervienen factores externos en su aparición.
Diagnóstico de la enfermedad
El diagnóstico de la enfermedad se hace mediante la observación del área donde aparecen las descamaciones y las lesiones cutáneas. A medida que la psoriasis avanza, los médicos pueden reconocer fácilmente su patrón de descamación característico, por lo que, en general, no hace falta hacer pruebas diagnósticas.
En algunas ocasiones los especialistas realizan una biopsia de la piel para confirmar el diagnóstico y descartar otras patologías que puedan compartir el aspecto y los síntomas.
El tratamiento de la psoriasis depende de cada paciente y del tipo de la enfermedad que tenga. A pesar de que no existe cura para esta enfermedad, sí se puede mantener totalmente controlada.

Novedad con fármacos biológicos
En los años 90, los fármacos biológicos irrumpieron en el tratamiento de la psoriasis y de la artritis psoriásica, causando una auténtica revolución. Desde entonces, miles de pacientes se tratan con estos medicamentos que, han permitido mejorar la calidad de vida de los afectados de forma notable. Ahora muchos de estos fármacos verán como, en 2 o 3 años, finaliza su patente. Este hecho abre la puerta a la aparición de un nuevo tipo de medicamentos: los biosimilares que como su nombre indica son parecidos pero no iguales a los biológicos originales.
Dentro de los biológicos, desde el año pasado contamos con Secukinumab muy bien recibido entre los Dermatologos y Reumatologos ya que da buena respuesta tanto si la Psoriasis afecta a la piel como a las articulaciones.
Este año ha llegado Apremilast que es una molécula de síntesis química, no un biológico que bloquea la acción de una enzima, la fosfodiesterasa que se encuentra dentro de la célula y que es la responsable del inicio del proceso inflamatorio que caracteriza a esta enfermedad. La eficacia de este medicamento es inferior a las citoquinas, pero similar al efecto del Metotrexato pero sin sus efectos indeseados, y hay que ser pacientes y esperar hasta los seis meses de tratamiento para ver el máximo efecto. Cabe destacar que solo está autorizado para tratar la Psoriasis moderada a grave y la artritis psoriasica.
Dentro del campo de investigación y en fases prometedoras para los afectados de Psorisis leve a moderada tendremos el Tofacitinib, investigándose tanto en vía oral como tópica.
La Espuma Calciopotriene, que se está usando en casos pediatricos y con éxito.
Recientemente un laboratorio ha presentado una solicitud de aprobación a la Agencia Norteamericana del Medicamento de una combinación de Calciopotriol y corticoides pero en espuma y en spray que ayudarían en cuanto a la comodidad del tratamiento.
De todo lo que les he avanzado, en España tenemos disponibles por ahora Secukinumab y Apremilast, resta seguir esperando a los resultados de los investigadores que aún les queda mucho por hacer.
La psoriasis es una enfermedad crónica que se mantendrá durante toda tu vida. Si recibes el tratamiento el impacto sobre tu calidad de vida no será muy alto.
Es fundamental que mantengas una higiene adecuada en la piel para evitar que se produzcan infecciones que puedan originar lesiones y un nuevo brote de la enfermedad.