El PGOU aumenta la protección arqueológica
El arqueólogo Juan de Dios Hernández hace balance de las principales actuaciones municipales que en materia de patrimonio histórico
En la imagen, Juan de Dios Hernández
El arqueólogo Juan de Dios Hernández hace balance de las principales actuaciones municipales que en materia de patrimonio histórico se han llevado a cabo a lo largo del año en curso. También habla acerca del importante yacimiento existente en la Isla del Fraile, unos trabajos de rescate que, según explicó en su momento la edil de Cultura, Clara Valverde, se llevarán a cabo tras sendas tareas de rehabilitación del Castillo de San Juan y el embarcadero de El Hornillo, respectivamente.
¿Desde su área de trabajo, ¿cómo valora este año 2006 ?
El 2006 se ha centrado en dos aspectos principales dentro del campo de la Arqueología: ahora mismo se está haciendo un trabajo en el tema del Plan General de Ordenación Urbana, recién aprobado, el cual contempla un apartado muy importante en lo que concierne a la protección arqueológica y protección del patrimonio. Por tanto, el nuevo Plan ha evolucionado sensiblemente respecto al del 93: se protegen todos los espacios arqueológicos, se protegen también todos los bienes que conocemos en ese sentido. Por otra parte, también se puede destacar la confección de una carta etnográfica, que no existía; los bienes etnográficos que hasta el momento no estaban protegidos, se han contemplado como protegidos. Los bienes etnográficos son desde caderas, hasta ermitas, como por ejemplo, la ermita de San Isidro. En definitiva, edificios singulares, etc., tanto dentro del casco urbano, como exteriores…
Todos sabemos que el Plan General es el instrumento con el que contamos para la protección arqueológica. Ahora tenemos poca preocupación desde aquí en el sentido de que se vaya a extinguir el patrimonio; las herramientas son para eso.
En cuanto al tema del Castillo, que ha sido uno de los puntos clave y cuyas obras están a punto de finalizar, hay que decir que ha tropezado con algunos problemas, pero ya sabemos que este tipo de obras siempre acarrean conflictos de última hora. Una obra de patrimonio comienza con un proyecto que casi por sistema se va complicando, pero nos hemos metido a fondo en ello y, repito, los trabajos se encuentran casi finalizados.
Respecto a la arqueología urbana, ahora se ha excavado poco en el casco urbano, creo que una fracción por la región del Molino, con escasos hallazgos; el año pasado se ejecutó la excavación de la prolongación de las termas orientales, en el edificio Roselló, pero que estaba arrasado totalmente. Aparecieron restos de la continuación de las salas frías, pero asimismo de escaso interés, sino más bien intuiciones.
¿Qué puede decir de interés acerca de los yacimientos de la Isla del Fraile?
En todos los planes urbanísticos que se están tramitando actualmente ha existido una labor de arqueología. Una labor de estudio previo para el impacto arqueológico. En todos. Se lleva a cabo y si se da el caso, el permiso es denegado. Entre ellos, hay algunos en los que ha aparecido algún bien de interés etnográfico, yacimientos arqueológicos no se han catalogado, porque realmente la zona donde se están proyectando estas actuaciones es precisamente costera (oriental de Águilas), en la que hay pocos yacimientos, un terreno que no es propicio, etc. Se van a proteger algunos bienes en la zona de Las Molinetas… o en la parte de Villa Isabel.. y en Dursa, como en todos los casos, lo primero que se hizo fue la protección arqueológica, detectándose una necrópolis, porque se conocía su existencia: la necrópolis de la Isla del Fraile.
Ahora bien, en lo que conocemos como Isla del Fraile propiamente dicha, no se ha excavado nunca, o se han realizado actuaciones muy superficiales. Se trata de estructuras de mucha entidad, y lo que se ha considerado como una línea de muralla impresionante, para mí no es tal, sino un muro de aterrazamiento, para poder instalar allí un complejo industrial de salazones.
Sabemos que en la Isla del Fraile hay un poblado que se puede considerar uno de los principales yacimientos que pueda haber en la región y que se conserva íntegramente y bastante bien.
Porque es un lugar donde la instalación industrial se encuentra en el mismo sitio donde estará el poblado, la zona de hábitat, y donde estarán zonas de ocio, de asueto; en fin, cuando se excave, se verá. Pero se trata de una zona en la que va surgir un pequeño poblado con todo lo que ello conlleva. Y uno de los elementos con que cuenta cualquier poblado es la necrópolis; pues bien, el cementerio tardorromano se encuentra en la costa, la costa de enfrente, lo que es el litoral de los corridos del Fraile, la prolongación de la playa amarilla. Esto se conoce desde antiguo. En el año 75 hay noticias de que, en el momento en que se realiza la preurbanización de la zona, aparecieron tumbas y muchos restos humanos. La necrópolis se degradó mucho en ese momento a causa de los vertidos de los trabajos.
En los estudios previos que realizamos posteriormente para poder delimitar un poco por donde iba, observamos las zonas donde superficialmente pudiese haber indicios de que todavía se encontrara alguna tumba. Lo que delimitamos en ese estudio se encuentra dentro de los cien metros de protección de costas. De hecho ahora mismo existe una zona en reserva que no se puede tocar. Para ver un poco el estado en que encontraba la necrópolis se realizaron dos excavaciones ( a la bajada de la urbanización previa y otra zona más al este). A la postre excavamos unas 24 tumbas.
