“Yo sólo soy un contador de historias”

LA ACTUALIDAD ENTREVISTA A DANY CAMPOS, CINEASTA Y ESCRITOR

El cineasta lorquino presentaba este mes de noviembre un libro solidario de relatos costumbristas. Bajo el título “Cucharada y paso atrás”, el autor recuerda historias que le contaros sus padres; otras, sencillamente, las inventa sobre bases históricas reales. Todas ellas son “historias corticas” –como él mismo las define– que giran en torno a Lorca
El cineasta lorquino presentaba este mes de noviembre un libro solidario de relatos costumbristas. Bajo el título “Cucharada y paso atrás”, el autor recuerda historias que le contaros sus padres; otras, sencillamente, las inventa sobre bases históricas reales.

Todas ellas son “historias corticas” –como él mismo las define– que giran en torno a Lorca.
El libro es una compilación de 40 relatos que el cineasta lorquino publicó durante 2013 en el DiarioElSol.es y que tienen como elemento de conexión la localización de las historias en el municipio de Lorca, donde no faltan las figuras de los lorquinos más ilustres como el músico Narciso Yapes, la maestra Pilar Barnés, el poeta Eliodoro Puche o el director teatral Alejandro Fernández-Rufete.
Cabe destacar que los beneficios de la venta del libro irán destinados a financiar proyectos solidarios de la ciudad, como APAT (Asociación de Padres de Atención Temprana de Lorca) o el proyecto Eva Recicla. La publicación de los libros ha sido gracias a la colaboración de la Obra Social de La Caixa.

Pregunta.-¿Cómo surge la idea de escribir “Cucharada y paso atrás”?
Surge de un encargo de Juan Antonio Hurtado, director de DierioElSol.es, quien me pidió que escribiera para esta publicación sobre Lorca. Como llevo viviendo en Madrid desde 1998, no estoy muy al tanto de la vida social de nuestra ciudad, así que pensé que estaría bien escribir ficción. A él le pareció estupendo.
Respuesta.-Cuando llevábamos unos 30 relatos, a Hurtado se le ocurrió compilarlos en un libro y dedicar los dineros de las ventas a alguna causa benéfica. Enseguida pensamos en APAT Lorca y en el proyecto Eva Recicla.

Pregunta.-¿Cuánto hay de ficción y realidad en sus relatos?
Respuesta.-Algunas de las 40 historias son reales, aunque aderezadas con un poco de ficción para darles más interés narrativo. Sin embargo, la mayoría son inventadas, apoyadas en datos reales para darles más rigor y credibilidad.
En cualquier caso, si tengo que elegir entre contar las historias tal y como ocurrieron o modificarlas para hacerlas más interesantes para el lector, elijo lo segundo. Al fin y al cabo, lo importante es el entretenimiento, las emociones. Para contar la historia están los historiadores y los periodistas. Yo sólo soy un contador de historias.

Pregunta.-¿Qué acogida ha tenido la publicación?
Respuesta.-Fantástica. Es algo de lo que me siento muy satisfecho. Por un lado, a los lorquinos lo que más nos interesa es Lorca y los lorquinos (risas). Somos muy celosos de nuestro acervo cultural, nuestro municipio y nuestras costumbres, y cualquier cosa que alimente eso es siempre bien recibido; por otro lado, es una constante el hecho de que cada vez que presento algún trabajo en Lorca la gente me muestra siempre su cariño, su lado más amable. Soy afortunado en eso.

Pregunta.-¿Tiene pensado publicar más libros?
Respuesta.-Digamos que no está entre mis planes. No soy escritor, en el sentido estricto de la palabra: soy cineasta y, como tal, me siento más cómodo con el lenguaje audiovisual. Para mí tiene más fuerza porque combina otras artes, como la fotografía, la música o la interpretación.
Una vez dicho eso, la experiencia ha sido muy interesante y, sin que sirva de promesa, no descarto volver a hacerlo en el futuro.

Pregunta.-El libro gira en torno a Lorca… Respuesta.-¿Qué hace a esta ciudad tan especial para usted?
La gente. Siempre la gente. Te podría decir que es el lugar donde nací y donde me crié. Pero a poco que lo piense, un lugar no es nada sin la gente que lo habita. En Lorca es donde están mis padres y mis hermanos, mis mejores amigos y mis mejores maestros. Y, como no soy muy importante, no tengo enemigos. Es perfecto.
Si nos ponemos un poco más melodramáticos, al final lo que a uno más le gusta es que le quieran (risas).

Pregunta.-Hasta la fecha su trayectoria está vinculada al mundo del cine… ¿En qué proyecto está trabajando actualmente?
Respuesta.-Después de seis cortometrajes escritos y dirigidos y algunos trabajos documentales para televisión, el cuerpo me pide hacer un largometraje. El único problema es que he llegado en el peor de los momentos para entrar en el circuito comercial. Además, mis historias nunca suelen ser para un público masivo, sino más para nichos concretos del mercado. Eso complica un poco más las cosas.
Después de dos intentos fallidos, estoy moviendo un largometraje titulado “Subprime”, un thriller político para el que espero encontrar productor. La cosa no está fácil, pero ya sabes que no hay nada peor que un tonto se empeñe (risas).

Pregunta.-¿Cómo ha cambiando el cine en estos últimos años?
Respuesta.-En mucho. Por un lado, la tecnología digital ha democratizado la posibilidad de hacer una película. Ahora es posible hacer una incluso con un móvil. Con eso me refiero a que es más fácil hacer una película, no entrar en la industria cinematográfica. Son cosas distintas.
Por otro lado, Internet y las redes sociales están modificando los hábitos de consumo, circunstancia que, en mi opinión, no se está aprovechando bien por la industria. Hay cierta pereza por salir del modo tradicional de hacer cine, cuando estos recursos tecnológicos nos brindan la oportunidad de replantearnos todo el proceso (financiación, producción y exhibición) y hacerlo más interesante para todos, creadores, productores y público.

Pregunta.-¿Qué destacarías de tu trayectoria como cineasta?
Respuesta.-Podría decirte lo evidente, lo que más se ve o se conoce, que son un par de películas que han funcionado bien y unos cuantos premios. Pero, para ser justos, el momento más importante de mi carrera fue por el año 1985, cuando mi padre y mis hermanos compraron una cámara doméstica y yo era sólo un estudiante de Bachiller. Sin ese acontecimiento, puede que mis actuales derroteros profesionales estuvieran ligados al deporte, no al audiovisual.

Pregunta.-¿Y cómo te defines en el terreno artístico?
Respuesta.-Como un creador que siempre y en cada momento piensa en el público. Creo que es lo más importante. Chaplin –al que considero el genio del siglo XX, junto a Albert Einstein– decía estar abierto a cualquier tipo de manifestación artística, pero con la única condición de que no fuera aburrida. Existen muchos creadores que se olvidan de eso, de no aburrir, y descuidan lo más importante en una película: el guión.
En ese sentido, para mí el cine no tiene sentido si no es para provocar emociones y saber manipular la percepción del público. Lo grande de este oficio es ser capaz de que la gente se olvide de su vida durante el transcurso de tu película.