Cómo combatir el calor en verano

Ya está aquí el verano, y como en los últimos años, el calor nos ha llegado de sopetón sin previo aviso. El termómetro se dispara alcanzando temperaturas altísimas durante los meses de julio y agosto. El calor se hace insoportable y nuestra salud puede resentirse. En la consulta la sensación de cansancio de los pacientes es generalizada y piden consejo de como llevarlo, en las personas mayores y niños los efectos pueden ser peores.
Aquí os indico unos consejos de como combatir el calor y poder disfrutar al máximo del verano.
1. Hidratación; Cuando hace mucho calor nuestro cuerpo pierde más cantidad de líquidos a través del sudor, y es que las altas temperaturas hacen que nuestro cuerpo tenga que equilibrar su temperatura interna mediante la sudoración. Por ello es necesario mantener una perfecta hidratación. Procura beber entre 2 y 3 litros de agua diarios, también se incluyen zumos naturales o granizados de fruta caseros sin esperar a tener sed. Evita las bebidas alcohólicas (aumentan el riesgo de deshidratación) y muy azucaradas.
2. Cuidar la alimentación; Ingerir alimentos ricos en líquidos y frescos es una buena alternativa para mantenernos más hidratados en esta época. Realiza comidas ligeras que te ayuden a reponer las sales minerales perdidas por el sudor. Evita comidas copiosas y cargadas de alimentos ricos en grasas y calorías, ya que de este modo el consumo de líquidos y el requerimiento de los mismos por parte del organismo será menor. Alimentos que combaten la fatiga y el cansancio;
Espinacas y verduras de hoja verde; su color verde de sebe a la clorofila. Su escaso aporte de calorías y su importante contenido en vitaminas dotan a este alimento de un destacable valor energizante. Su riqueza vitamínica (A, B9, E o C) y su elevado contenido en hierro hacen de este alimento un aliado estupendo para cargar las pilas del cuerpo. La carencia de ácido fólico, magnesio y de hierro pueden tener como consecuencia anemia, y con ello cansancio físico. Incluye este tipo de hoja diariamente en tus platos (revuelto de espinacas con huevo, ensaladas, hervidos…)
Plátano; rico en nutrientes y aporta mucha energía, están considerados superalimentos por los completos que son. Contienen vitamina B6 y triptófano que nos ayudan a combatir el cansancio y fatiga tanto físico como mental.
Frutos secos y semillas; Son los alimentos energéticos por excelencia. Contienen una gran cantidad de ácidos grasos esenciales, capaces de disminuir el cansancio físico y emocional, el estrés, ansiedad o insomnio, que el organismo humano no puede sintetizar por sí mismo. Destaca la presencia de minerales (magnesio, fósforo, potasio, calcio, hierro, zinc y selenio), que es superior al resto de las frutas y que, además, tienen poder antioxidante. A esto se suman importantes cantidades de proteína y fibra, que ayudan a regular el tránsito intestinal y mejorar la musculatura.
Es un alimento idóneo para llevar siempre encima, ya que representa un combustible eficaz a cualquier hora del día. Es el tentempié perfecto para asegurar la energía al cuerpo. Sin embargo, hay que tener en cuenta su elevado contenido en grasas, por lo que las personas con sobrepeso deben moderar su consumo. El truco consiste en tomar un puñado al día y seleccionar los frutos secos crudos y sin salar. Es un alimento que aporta vitalidad y que, al mismo tiempo, tiene un gran poder saciante.
Pimiento rojo; los alimentos ricos en vitamina C favorecen el buen funcionamiento de nuestro sistema inmunitario y nos mantiene sanos, evitando caer en estados de cansancio. Consume alimentos ricos en vitamina C como fresas, naranjas, limones, higos, apio, piña…
Chocolate puro; cuanto más puro, mejor. El chocolate es fuente de energía y mejora el estado de ánimo. La presencia de estimulantes (Teobromina) en su composición hace de este alimento una buena elección para mantener la energía del organismo (además de darse el gusto). El chocolate es un alimento rico en magnesio, potasio, fósforo y hierro, vitaminas A, E, B1 y B2, lípidos y proteínas. Sus moléculas contienen gran cantidad de energía que el cuerpo sabe cómo utilizar, pero siempre sin abusar de él, tomándolo en cantidades moderadas.
Hidratos de carbono de absorción lenta; son los preferidos del organismo, ya que tienen la capacidad de liberar energía poco a poco, a medida que el cuerpo la necesita. El arroz, las patatas, la pasta, el pan, las legumbres y la gran mayoría de cereales son alimentos ricos en hidratos de carbono que aportan la energía necesaria para el buen funcionamiento físico y psíquico del organismo. En deportistas, ya sean profesionales o aficionados, es recomendable una dieta rica en estos alimentos para garantizar una adecuada reserva energética. Este tipo de alimentos son ideales para el verano.
Té verde; además de ser rico en antioxidantes y en L-teanina, con acción para bajar los niveles de ansiedad y estrés. Además la L-teanina mejora la memoria y el poder de concentración, así como la regulación del ciclo del sueño.
Carne magra. Carne magra significa con poca grasa. La carne magra del cerdo y la ternera, el pollo sin piel y el pavo son una importante fuente de proteínas. Sobre todo aportan tirosina, un aminoácido que aumenta la concentración y el estado de alerta. Son carnes con una elevada cantidad de vitamina B12, que ayuda a combatir los estados de depresión y cansancio
3. No olvidar los hábitos; realizar de 5 a 6 comidas diarias, con tentempiés a base de frutos secos y frutas ricas en vitamina C. La comida más importante del día debe ser el desayuno, debe de aportar la energía suficiente para cubrir los requerimientos del organismo de todo el día. La comida a medio día, debe ser a base de verdura de hoja verde, acompañada de proteínas magras (pollo, pavo, ternera magra) y un hidrato de carbono de absorción lenta, patatas asadas o una porción de arroz. Y para finalizar el día, evita cenas pesadas, repite el consumo de hoja verde y con un poco de proteína.