San Patricio y la batalla de Los Alporchones

La conquista del último territorio musulmán en suelo hispano, el Reino de Granada, supuso la desaparición definitiva de “La Frontera“, después de dos siglos y medio. La ciudad de Lorca quedaba liberada de su misión militar, dando un paso hacia la expansión demográfica y urbana. Se construyeron nuevos espacios, como plazas, iglesias, edificios civiles, etc. A menudo, a costa de la muralla. Las reformas urbanísticas contribuyeron a definir la imagen del municipio.

Renacer de Lorca (Murcia)El templo de San Patricio se construyó para conmemorar la victoria en la batalla de Los Alporchones. Su ejecución comenzó en 1533, sobre la vieja iglesia de San Jorge, pero su construcción se dilató hasta finales del siglo XVIII.

Con la Paz, Lorca pasó de ser una plaza defensiva, a ser cabecera de una extensa comarca. Esta nueva función supuso la reorganización del sistema municipal, incluso eclesiástico. No más de 6.000 lorquinos se dispusieron a tomar posesión de su territorio, ¡de 2.500 km2!. Lorca se convirtió en una ciudad renacentista, aunque su territorio siguió muy despoblado, mantenido así por los “Señores del Ganado“, enriquecidos por la venta de lana. La frontera con Granada desapareció, pero no el peligro. La nueva frontera es la costa.

En 1535, el platero Pedro Santángel grabó la matriz de dos sellos de plata, con la representación de los escudos del Concejo para timbrar los documentos oficiales, aunque después se fusionó en uno solo. En 1547 se encargó al bordador granadino Diego López de Cariga, la confección de un pendón carmesí con el escudo de armas de la ciudad.