El Ministerio de Sanidad recomienda la administración de paracetamol de forma previa a la vacunación con el preparado de AstraZeneca como método para evitar reacciones adversas, que suelen ser leves, de corta duración y no afectan a todas las personas vacunadas.
Esta sugerencia aparece en la cuarta actualización de la estrategia de vacunación, publicada el pasado viernes por este ministerio.
Mientras no terminen los ensayos clínicos sobre los efectos de esta vacuna en mayores de 55 años, su aplicación solo está recomendada a personas de entre 18 y 55 años. Es el inmunógeno que se está administrando al personal sanitario y sociosanitario y a los colectivos esenciales, mientras las vacunas de ARNm (Pfizer y Moderna) se destinan a las poblaciones más vulnerables y con mayor riesgo de exposición.
Sanidad ha observado “reacciones locales y sistémicas leves frecuentes tras la vacunación” con AstraZeneca, aunque en la mayor parte de los casos tienen fácil remedio: “Se pueden utilizar dosis de 1 gramo de paracetamol previas a la vacunación, seguidas de 1 gramo cada 6 horas durante las primeras 24 horas, lo que reduce significativamente el dolor local, la febrícula, los escalofríos, las mialgias, la cefalea y el malestar posvacunal, sin influir en la respuesta inmune”.
La medicación profiláctica previa a la recepción de los inmunógenos de Pfizer o Moderna no está indicada por el Ministerio por falta de datos de los laboratorios.