Pasión y magia en el Viernes Santo

El nuevo trono de la Amargura despertó el fervor entre los blancos, mientras que el paso Azul presentó la espectacular carroza de Cleopatra

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Majestuosidad. Bajo este término, se podría definir el desfile bíblico pasional que el pasado Viernes Santo recorrió las calles de la Ciudad del Sol ante la mirada de cerca de 100.000 personas que ondearon pañuelos blancos y azules, azules y blancos.Visita la galería fotográfica

Una vez se llevó a cabo la tradicional recogida de banderas daba comienzo un espectáculo sin igual que este año estuvo presidido por la imagen del Paso Blanco que procesionó por primera vez ante miles de blancos; la Virgen de la Amargura estrenó un nuevo trono realizado con oro, plata y marfil y portado por 133 portapasos.
Pero el desfile bíblico pasional dio mucho de si durante más de cuatro horas, donde se recreó a un pueblo en sintonía con los textos bíblicos y las civilizaciones asirias, babilónicas, hebrea, romana y egipcias. Pero, sin duda, amén de las imágenes de los diferentes pasos, los caballos fueron de nuevo protagonistas, bien acompañando a una figura representativa o en bigas, cuadrádigas, trigas…
La Virgen de los Dolores, con su nuevo trono que estrenó el pasado 2007 y que cuenta con 250 kilos de plata, puso en pie a los azules que comprobaron como su procesión contó, por un lado, con un cortejo bíblico compuesto por el estandarte guión, los exploradores a la tierra de promisión, la infantería romana, la bandera, Antioco IV Epífanes, Ptolomeo IV, los etíopes, Moisés, Meiamén, las profetisas egipcias, el emperador Julio César, Cleopatra, la caballería egipcia, Marco Antonio, Nerón, las cuadrigas, el emperador Tiberio César, el triunfo del Cristianismo, la caballería de los dioses mitológicos y la carroza del triunfo del Cristianismo.
Sin duda, despertó especial interés la nueva carroza de Cleopatra, que re escenificó a la faraona egipcia de la dinastía de los Lágidas, que procesionó en el pasaje del recibimiento al diunviro como gobernador de Oriente. La misma, de espectaculares dimensiones, ha sido realizada sobre una base en forma de estrella que representa a Ra, dios del Sol y fue portada por 127 esclavos egipcios, todos ellos de color.
A continuación de este desfile bíblico, le tocó el turno a la procesión religiosa.
Ya había transcurrido más de horas de procesión y entró en escena el paso blanco con su estandarte guión, que dejaba paso a la caballería romana, infantería romana, Octavio César Augusto, Todosio I, Flavio Valerio Constantino, Marco Licinio Liciniano, Marco Aurelio Valerio, el grupo de Santa Elena, la caballería imperial, el grupo de Nabucodonosor, las tribus de Israel, el grupo del rey Salomón, el grupo de la reina de Saba, el cisma de las Tribus, la Visión Apocalíptica de San Juan, los nazarenos, la carroza de la Visión de San Juan, la Salvación, el estandarte de la Santa Faz, el trono de la Verónica, el estandarte de la Oración en el Huerto y la bandera. Por supuesto, la virgen de la Amargura, seguida de sus mayordomos, mostró todo su esplendor bajo una lluvia de pétalos que caían desde los balcones y los palcos.
Además de los pasos blanco y azul, también tomaron parte la la Cofradía del Santísimo Cristo del Perdón, Paso Morado y la hermandad de la Curia, la archicofradía del Santísimo Cristo de la Sangre, Paso Encarnado y el paso Negro.