Los bazares chinos comienzan a incluir productos «made in Spain» en sus estantes
El fenómeno del comercio oriental continúa avanzando y, al igual que en el resto de España, en Águilas tiene su reflejo en la proliferación de establecimientos regentados por ciudadanos de nacionalidad china.
Los bazares chinos, como se conocen popularmente, han supuesto además un nuevo concepto del antiguo establecimiento de todo a cien. Si hace unos años los bazares eran lugares en los que se podían adquirir productos de bajo coste, centrados sobre todo en menaje de hogar y papelería, los actuales establecimientos orientales se caracterizan por disponer de un amplísimo catálogo de productos desde ferretería y textil, hasta jardinería, electricidad e, incluso, zapatería o productos de peluquería. Se trata en definitiva, de un nuevo concepto de establecimiento de proximidad que, podría asemejarse, en cuanto a variedad de productos, a una gran superficie comercial en la que los compradores pueden adquirir productos que pueden oscilar entre los 0,60 céntimos y los 200 euros.
Made in…China?
No obstante, la crisis económica está teniendo también su reflejo en estas grandes superficies de productos multiprecio, no tanto en lo que a ventas se refiere sino más bien en los productos. Así, según ha podido constatar La Actualidad la procedencia de los artículos que se pueden adquirir en estos establecimientos, que hasta hace unos meses era exclusivamente China, comienza a cambiar.
A pesar de que el país de la Gran Muralla sigue liderando la producción de los productos que se venden en este tipo de comercios, el made in China exclusivo se está viendo desplazado en los últimos meses sobre todo en la gama de productos de menaje e industriales, mientras que se mantiene en la totalidad de los artículos textiles y de complementos. Unos datos que tienen su reflejo en los últimos datos publicados a nivel nacional sobre comercio exterior, que recogen un importante recorte en las importaciones de China que han pasado de 3.581 millones de euros a 2.610 millones en el primer trimestre, lo que supone un 27% menos interanual.
