El Gobierno de Lorca apoya al sector primario favoreciendo la adaptación del pequeño ganadero a la legislación actual vigente

Este equipo de Gobierno mantiene su postura responsable con la ganadería, posibilitando la conciliación con la norma actual, bajo los criterios de publicidad y transparencia

 

Este actuación supone un paso decisivo dentro del proceso de armonización social, marcado por el diálogo y que permite conciliar usos y seguir avanzando en este camino, sin posturas maximalistas, ni de extremos

 

María Hernández, edil de Urbanismo: “Queremos que el pequeño ganadero, que ha trabajado su explotación durante años, en Suelos clasificados por el Plan General como Suelo Urbanizable sin sectorizar, pueda cumplir con todos los requisitos que le exige la legalidad, teniendo, además así, todas las garantías”

 

Ángel Meca, concejal de Ganadería y Agricultura: “Nuestra prioridad es proteger al sector primario, que sabemos con certeza que continuamente sufre vaivenes legales que lo fuerzan a actualizar sus explotaciones. Lo que estamos haciendo es favorecer su adaptación, y que no se encuentre en desventaja ante las nuevas y grandes industrias” 

La protección del sector primario y del pequeño ganadero. Ese es el objetivo fundamental del paso dado por el Ayuntamiento de Lorca en aras de la continuidad del sector y de la prosperidad de decenas de pequeñas explotaciones en el municipio.

Un paso decisivo que supone, en último término, que determinadas granjas porcinas puedan mantenerse ‘con vida’ y en el marco comercial gracias a determinadas herramientas de calado municipal que les facilitan su adaptación a la legislación actual vigente.

“El sector primario es la base de nuestra economía y merece una defensa firme y contundente. En Lorca contamos con explotaciones familiares, de pequeña envergadura, que llevan operando muchos años, toda la vida, algunos de ellos a un paso de jubilarse, y deben hacer frente a determinados cambios si no quieren poner en peligro su estabilidad y, en definitiva, su supervivencia; y ahí es donde nosotros podemos ayudarles”, ha apuntado Ángel Meca.

“El sector ganadero lorquino es un pilar fundamental de la economía local y su carácter lo hace especialmente sensible ante las nuevas y grandes industrias, pero también ante las actualizaciones de la norma que enmarca su actividad, y que abarca diversas áreas, como la producción, los mercados y el comercio exterior, la protección y el bienestar animal o la trazabilidad, sanidad o higiene ganaderas, entre otros”.

“Actuaremos ahí donde nos sea posible con todas las herramientas a nuestro alcance, bajo un marco garantista para los vecinos y los criterios de publicidad y transparencia, con el fin de que estos pequeños ganaderos puedan cumplir con todos los requisitos y tener todas las garantías”, ha reseñado Meca, que ha destacado que “la publicación no era obligatoria, pero este equipo de Gobierno actúa de conformidad social, porque así entendemos nuestro modelo de municipio”

“Concretamente, la modificación -ha indicado María Hernández- ha consistido en la creación de un régimen transitorio urbanístico específico para las explotaciones porcinas existentes afectadas por el proceso de regularización administrativa, determinado en la Orden del Consejero de Agua, Agricultura, Ganadería y Pesca, con fecha 20 de marzo de 2023, afectando a explotaciones ubicadas en Suelos clasificados por el Plan General como Suelo Urbanizable sin sectorizar, como Suelo No Urbanizable Inadecuado para el Desarrollo Urbano y Suelo No Urbanizable protegido por el Planeamiento excepto en aquél con grado de protección muy alta”.

“Estamos hablando de la continuidad del Régimen Transitorio por el que se respetará la actual ubicación de las explotaciones de ganado porcino existentes, que resulten favorables del proceso de regularización administrativa al que hace referencia dicha Orden, permitiéndose las actuaciones necesarias en las explotaciones que deban adecuarse a las normas de bienestar animal de conformidad con el apartado 5 de dicho artículo y los cambios de orientación de producción animal”.

El objeto principal de este cambio puntual y no estructural del P.G.M.O. de Lorca, es la modificación del artículo 148.3, del capítulo 11, del tomo II de la normativa del P.G.M.O, sobre normas particulares de las instalaciones porcinas, con la finalidad, como decimos, de mantener ese régimen transitorio específico para las explotaciones porcinas existentes con autorización temporal adheridas a las condiciones de la citada Orden, y por la que se acuerda la creación de un grupo de trabajo de cooperación con el Ayuntamiento. (Cabe reseñar, que esta modificación no altera los demás parámetros que se recogen en el Plan General Municipal de Ordenación de Lorca).

Pues bien, “fruto de esta actuación y del trabajo conjunto entre Comunidad Autónoma y Ayuntamiento, y de todos los técnicos y funcionarios que han participado en este proceso durante años, se concluye que son 58 explotaciones porcinas las que finalmente son incluidas en este procedimiento. Se trata de pequeñas explotaciones porcinas tradicionales que están funcionando más de 20 años y que están ya situadas en suelos que no han tenido o no van a tener desarrollos urbanísticos a medio o largo plazo”, ha apuntado Meca.

Concretamente, 52 titulares de explotaciones afectadas han manifestado su interés en la adhesión al Régimen Transitorio, mediante la presentación de la correspondiente instancia. 6 titulares de explotaciones afectadas directamente no han presentado la solicitud.

Cabe reseñar que se ha pedido informes de conformidad a 17 organismos públicos: 12 de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia (Direcciones Generales de Patrimonio Natural, Ganadería, Agua, Medio Ambiente, entre otros) y 5 de la Administración General del Estado (Confederación Hidrográfica del Segura y Mancomunidad de Canales del Taibilla, entre otros); así como a Ecologistas en Acción y a la Asociación de Naturalistas del Sureste (ANSE-Murcia).

Del informe de la Confederación Hidrográfica del Segura se concluye que son 39 explotaciones las que han justificado la disponibilidad de recursos hídricos, debiendo adaptarse las mismas a la Ley de Bienestar Animal y a toda la normativa vigente, como si de una nueva explotación porcina se tratara.