La Sala de Estudio de la Casa de la Juventud ‘Capri’ llevará el nombre “Maestro Don Paco Sánchez”
El pleno corporativo, reunido anoche en su sesión ordinaria del mes, aprobó por unanimidad la propuesta de denominación honorífica de la sala de estudio ubicada en la Casa de la Juventud ‘Capri’ con el nombre de “Maestro Don Paco Sánchez”, en base a los méritos, cualidades y circunstancias singulares que concurrieron en la persona de don Francisco Sánchez García, que le hacen acreedor de este honor y distinción.
La edil de Educación, Francis Gallego, comentó durante el Pleno que “es uno de los grandes maestros de la época, mereciendo honrarse su memoria por haber tenido durante toda su vida una enorme vocación por la docencia, a la que pudo dedicarse pese a las adversas circunstancias históricas que le tocaron vivir y después de los múltiples obstáculos a los que tuvo que enfrentarse, lo que concede un enorme mérito, siendo todo un ejemplo de vocación y dedicación a la digna profesión de maestro y constituyendo todo un referente para muchos aguileños”.
D. FRANCISCO SÁNCHEZ (Extracto de un Artículo de Pedro Francisco Sánchez Albarracín)
Don Francisco Sánchez García nació en Águilas en 1919. Hijo de ferroviario, su padre quiso que tuviera una educación adecuada. Los estudios de Bachillerato los hizo en la Academia General de Enseñanza de Eduardo Fernández Luna durante los cursos 1932-1936. En septiembre de 1936 acabó los Estudios Superiores, siendo su propósito ejercer la docencia por considerar que la educación era el medio para que España prosperara. En octubre de 1936, después de haber estado voluntario en el frente, entrará como auxiliar de clase en la escuela de Rafael Martínez Cano, haciendo en mayo de 1937 la matrícula para la carrera de Magisterio que no pudo iniciar. Estará entonces como secretario en el hospital Militar de Águilas desde julio de 1937 hasta marzo de 1938, en que ingresa en la Escuela de Artillería de Paterna. El 19 de agosto de 1938, el mismo día que cumplía diecinueve años, le dieron el nombramiento de Teniente de Artillería destinado al Ejército de Andalucía en el sector de Villa del Río. Al terminar la Guerra Civil, fue encarcelado durante cinco años. Precisamente en la cárcel de Valladolid ejerció de maestro en la escuela de la prisión ayudando a muchos reclusos. Una vez en libertad tuvo que superar muchos obstáculos e incluso volver a sacarse la carrera. Su vocación docente era tan grande que nada le frenó. El primer destino donde pudo ejercer fue la Torre de Juan Abab, en Ciudad Real, donde se trasladó con sus hijos por un año. Por mediación del cura del Carmen, Francisco Martínez Zapata, le dieron en Águilas la escuela parroquial del Cementerio Viejo. Después de unos años se trasladó a la escuela parroquial de la calle Lotería. En las clases impartía la enseñanza a alumnos de distintas edades. Hizo además una importante labor en la preparación de banca y magisterio, a nivel particular, con cientos de aguileños, teniendo una enorme reputación en esta faceta. Francisco Sánchez pasó definitivamente a las escuelas Graduadas Nacionales, llamadas después colegio Francisco Franco, donde ejerció como maestro hasta su jubilación en 1985. Muchos fueron los alumnos que se beneficiaron de sus enseñanzas.