El calor extremo provoca 62 muertes en la Región de Murcia en menos de dos meses
En todo el país se han registrado 1.180 fallecimientos por esta causa en el periodo comprendido entre el 16 de mayo y el 13 de julio de 2025
El sistema de Monitorización de la Mortalidad diaria (MoMo) del Instituto de Salud Carlos III ha atribuido a las olas de calor 1.180 fallecimientos en el periodo comprendido entre el 16 de mayo y el 13 de julio de 2025 -62 de ellas en la Región de Murcia-, frente a las 70 del mismo periodo del año anterior.
Estas son algunas de las conclusiones más destacadas de la reunión que han mantenido los representantes del Observatorio de Salud y Cambio Climático (OSCC) para analizar la evolución de las temperaturas extremas y su impacto en la salud de la población durante las últimas semanas.
En el encuentro, según informa Sanidad, se han compartido datos procedentes de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), del Instituto de Salud Carlos III, a través del sistema MoMo y del Ministerio correspondientes a ese periodo.
En los datos, que son los correspondientes al periodo comprendido entre el 16 de mayo y el 13 de julio de 2025, se observa que se han registrado 76 activaciones del nivel rojo por calor extremo, mientras que en el mismo intervalo de 2024 no se produjo ninguna. Por otro lado, los registros de la AEMET, el mes de junio de 2025 ha alcanzado una temperatura media mensual de 23,6 ºC, superando en 0,8 ºC el anterior máximo histórico registrado en junio de 2017. Esta cifra también excede en 3,5 ºC la media del periodo climático 1991-2020.
Además, en la primera semana del mes de julio, los fallecimientos atribuibles al calor aumentaron un 47% respecto al global del mes de junio, lo que revela una tendencia ascendente en los impactos sobre la salud. En un comunicado conjunto, advierten de que las previsiones meteorológicas apuntan a que el mes de julio continuará con temperaturas por encima de la media histórica en la totalidad del territorio nacional, con una probabilidad estimada superior al 70 por ciento.
El análisis del perfil demográfico de los fallecimientos indica que el 95,08% de las personas fallecidas tenía más de 65 años. Del total, el 59,24% eran mujeres. Esta distribución responde tanto a la mayor presencia de mujeres en las edades más avanzadas como a factores fisiológicos que inciden en una mayor vulnerabilidad a los efectos del calor.