Gesalor avanza en Lorca en una planta para convertir en abono y energía 2 millones de metros cúbicos de purines al año
La gestión de los purines de cerdo es uno de los principales retos medioambientales de Lorca, donde se encuentra la mayor cabaña ganadera de porcino de la Región y una de las principales del territorio nacional. En este sentido, los millones de toneladas de este residuo orgánico muy contaminante que generan cada año las granjas intensivas de cerdos se han convertido también en una forma de negocio para muchas empresas que han puesto su foco en Lorca, buscando rentabilizar lo que ahora es un problema.
En febrero de este año, el Ayuntamiento concedió esta semana la declaración de interés público al proyecto para construir una planta de biogás a partir de purines y residuos agrícolas no peligrosos en la pedanía de Torrealvilla. Su promotor, la mercantil Aurea Green Gass, con una inversión de 10 millones de euros, construirá la instalación en unos terrenos de 87.000 metros cuadrados en el paraje Cañada Salvador, donde funciona otra planta similar desde 2015. El objetivo es generar 32 gigavatios hora de biometano para su inyección a la red gasista.
Proyectos de Gesalor
En la misma linea, la cooperativa ganadera Gesalor impulsa la construcción de dos plantas de biometano en la Región de Murcia. Las mismas estarán ubicadas en Lorca y Fuente Álamo, siendo puestas en marcha gracias a la colaboración de Five-E, una compañía madrileña especializada en la sostenibilidad y las energías renovables, que se une a este proyecto como socio capitalista y comercial. El objetivo principal de la cooperativa lorquina es encontrar una solución estable para que sus ganaderos puedan impulsar la sostenibilidad a través de la economía circular.
El proyecto de Lorca tiene ya varios pasos dados, ya que la cooperativa Ganaderos de Gestión Medioambiental de Purines (Gesalor) está a la espera de que el Ayuntamiento adjudique los terrenos, de forma que la construcción podría iniciarse este mes de noviembre. Tras ello, se necesitarían unos 8 meses para completar la balsa para el depósito del purín y la maquinaria para el tratamiento del biofertilizante, a lo que habría que sumar otros 4 o 5 meses más para completar los trabajos requeridos para el biometano, con lo que todo debería estar listo para comienzos del 2025.
La planta, que tiene un presupuesto de 48 millones de euros, combinará la separación de la fracción sólida y líquida y como resultado de ese tratamiento se obtendría un abono líquido apto para la fertirrigación, aplicable a la agricultura y haría posible la cogeneración eléctrica y de gas durante el proceso.
El consistorio va a poner a disposición de Gesalor una parcela municipal de 20 hectáreas situada en las inmediaciones del Centro de Gestión de Residuos de la empresa pública Limusa en el paraje de Barranco Hondo.
La planta, que tiene un presupuesto de 48 millones de euros, combinará la separación de la fracción sólida y líquida y como resultado de ese tratamiento se obtendría un abono líquido apto para la fertirrigación, aplicable a la agricultura y haría posible la cogeneración eléctrica y de gas durante el proceso.
El alcalde de Lorca, Fulgencio Gil, quiso destacar que «la planta supondría la resolución del problema de la gestión de los residuos ganaderos en un municipio como Lorca con una gran cabaña de ganadería intensiva, que supera el millón de cerdos».