Maru-jasp cruza el ecuador del Paco Rabal
La compañía Maru-jasp fue la encargada de llevar a escena El cerco de Leningrado, tercera de las obras a concurso del Certamen Nacional de Teatro Aficionado.
 Con solo dos actrices sobre el escenario, Maru-jasp logró suscitar en el público sonrisas y nostalgia a través de las conversaciones de Priscila y Natalia, dos mujeres que llevan más de veinte años sin salir del teatro donde años atrás su compañía luchaba por lograr que el hecho teatral trascendiera más allá de la representación.
Con solo dos actrices sobre el escenario, Maru-jasp logró suscitar en el público sonrisas y nostalgia a través de las conversaciones de Priscila y Natalia, dos mujeres que llevan más de veinte años sin salir del teatro donde años atrás su compañía luchaba por lograr que el hecho teatral trascendiera más allá de la representación.

 
			