“Para mí es un orgullo llevar este belén que tiene más de cincuenta años”

Entrevista a Pedro Sánchez, encargado del belén del Paso Azul, antiguo Belén de San José. Se encuentra en el Centro Comercial Águilas Plaza

Una entrevista de Ginés Jesús Gómez


Pregunta:
¿Desde cuándo llevan montando este belén?
Respuesta: Este Belén arrancó hace cincuenta años con el propietario de Muebles San José, pero yo llevo con él desde el 2016 años porque ya llevaba unos años que en Muebles San José no se montaba, por lo que decidieron cedérselo al Ayuntamiento de Águilas, y la alcaldesa nos dijo que si queríamos montarlo nosotros para que no se perdiera. Para mí es un orgullo, y el primer año lo hicimos con Antonio para aprender y ya en el 2017 sí que me quedé yo al frente del belén en solitario.

P: ¿Cuáles son las principales características del Belén del Paso Morao?
R: Sus características principales son, a diferencia de los demás, que está todo en una escena mayormente paisajística. Representa los principales monumentos de Águilas, así como los principales oficios que ha habido aquí: la ganadería, la agricultura, etc. La magia de este belén está en llegar y encontrarse con cuarenta metros cuadrados.

P: ¿Y cuál diría que es la parte más importante de este belén?
R: El Nacimiento y la zona del mercadillo y de la carpintería que es donde más concentración de piezas móviles hay. En las dos zonas hay unas ocho o diez piezas en movimiento que están juntas.

P: ¿Hasta cuándo estará abierto?
R: Estamos abiertos hasta el día 5 de enero, a excepción del 25 de diciembre y el 1 de enero que el centro comercial cierra sus puertas.

P: Y a la hora de montarlo, ¿cuánto se tarda?
R: Tardamos tres semanas aproximadamente. Entre las estructuras y todo lo demás se suele ir a veintiún días, pero trabajando todas las noches desde las 8 de la tarde. Ten en cuenta que son cuarenta metros cuadrados y que lleva más de 700 piezas, la mitad de ellas móviles y eléctricas, por lo que tenemos que meter cerca de 5.800kg de arena y luego enterrar toda una red de cable para que no se vea. Luego hay que arreglar todas las escenas.

P: ¿Y en desmontarlo?
R: Desmontarlo es más rápido. Hay que envolver todas las piezas pero la recogida no es tan complicada como el montaje.

P: Cuando acaba la Navidad, ¿qué hacen con el Belén?
R: Una vez que se ha recogido, nosotros nos encargamos de los más delicado y se guarda en los bajos del Auditorio, que es donde se queda hasta la siguiente Navidad, que lo volvemos a traer aquí, al Centro Comercial, que es el único sitio donde podemos montarlo.

P: Un belén de estas características, ¿requiere de muchos cuidados?
R: Sí, de hecho este año ya hay alguna pieza que ha dejado de funcionar porque son muchas horas todos los días las que están en marcha y son motores pequeños. Cuando lo desmontamos reparamos las piezas que han dejado de funcionar para que al año siguiente vuelvan a estar en movimiento. Además, este año queremos retocar un poco las construcciones, que es lo que tiene más falta.

P: ¿Se inspira en algo a la hora de montarlo?
R: Más bien continuamos la tradición y seguimos la línea cronológica que marca el propio belén, pero el resto de piezas las vamos cambiando de lugar para que la gente venga y cada año vea que ha cambiado algo. Seguimos el orden en unas escenas, pero el resto lo cambiamos de lugar.

P: Por último, anime a la gente a que venga a verlo.
R: Nosotros pretendemos mantener la tradición y que esto siga vivo, ya que por desgracia se está perdiendo. Y no solo animo a que la gente venga a este, sino que la gente vaya a los demás también porque es bonito de ver y es tradición y de ahí es de donde nace la cultura de un pueblo.

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