Crece la inseguridad en Águilas tras la oleada de robos en comercios, viviendas y vehículos que está sufriendo el municipio
Los autores de estos robos son un grupo de adolescentes, de los que la mayoría son menores de edad, que van armados
Águilas lleva varios meses sufriendo una gran oleada de robos; la delincuencia ha crecido considerablemente en los últimos meses, hasta el punto de convertirse en un “problema muy grave”, tal y como denuncian numerosas personas del municipio. Si a principios de año eran los vecinos de El Placetón los que denunciaban constantemente a un gran grupo de menores de edad que cometían delitos y vandalismo, ahora esta oleada de robos y delincuencia se ha extendido al resto del municipio.
Esta situación es provocada por un grupo numeroso de adolescentes con edades comprendidas entre los 14 y 19 años, que han cambiado su estrategia para delinquir. Anteriormente robaban a personas por la calle y a plena luz del día, pero ahora entran a numerosos comercios o rompen ventanas de coches, cambiando así la luz del día por la plena noche. Sus golpes suelen ser sobre la una de la madrugada.
Y no solo eso, sino que también entran en las viviendas cuando las personas están durmiendo y suelen ir armados con navajas y con la cara cubierta; por lo que se recomienda no enfrentarse a ellos. Sin ir más lejos, la pasada noche entraron en dos viviendas de la Urbanización de Los Jardines, pero no lo lograron porque en algunos lugares de la localidad se han tomado precauciones para evitar estos robos. En otras ocasiones sí que consiguieron su objetivo y es que han roto más de una decena de ventanas de coches para robar en su interior, rompieron la persiana de la Farmacia de Emilia Bayona, y en otros comercios de la localidad, donde además de robar también rompen la puerta o la persiana, causando desperfectos que encima deben pagar los propios comerciantes.
Los lugares en los que más suelen robar y delinquir son Los Jardines, el casco antiguo de Águilas y la pedanía de Calabardina, donde llevan varias semanas recogiendo firmas para que se realicen más controles policiales que eviten estos robos.
Además, estos jóvenes también suelen realizar botellones y consumir estupefacientes, siempre en grupos de más de 15-20 personas y dejando toda la zona llena de desechos y residuos para los viandantes.
La Policía Local y la Guardia Civil no dan a basto con los numerosos robos que producen este grupo de adolescentes, por lo que se debería mandar refuerzos para evitar estas situaciones y que los aguileños y aguileñas vuelvan a sentirse seguros en su ciudad; o por el contrario enviar a un centro de menores a este grupo para que la tranquilidad vuelva a la localidad.
