¡Oh, las rusas!
No cabe duda de la vigencia del precepto. En estas tierras meridionales, pero no sólo en ellas. “Ponga una rusa en su vida” ha sido lema y objetivo de muchos varones entrados en la mediana edad, que peinan canas y desengaños, que están de vuelta de las enrevesadas tramas de Cupido, curtidos en…
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