RAÚL “EL REY”
Un artículo de Manuel Morales García
Paseo por las calles de Lorca, la ciudad que hiciste tuya y a la que amaste tanto como a tu Habana natal. Muy joven, casi un niño, dejaste tu preciosa isla en busca de oportunidades y un futuro mejor. Tras tu estancia en otros lugares recalaste en esta tierra. Y en mi paseo, te veo haciendo aquello que tanto te gustaba: contar cuentos y sacar una sonrisa a los niños. Llego al Teatro Guerra y ahí estás, entre bambalinas, esperando el momento siempre con la ilusión de la primera vez. En mi triste caminar, transito por los diferentes museos y te observo en alguno de tus múltiples personajes; o en el Monte Calvario en la representación de la Pasión de Cristo; o de Papá Noel o de Rey Mago en unas navidades que ya nunca serán iguales. Recalo en la Fortaleza del Sol, tu castillo, probablemente el lugar en el que más disfrutabas, y te veo con tu capa y espada junto a la Torre Alfonsina, dispuesto una vez más a hacer las delicias de pequeños y mayores. Siempre he pensado que en nuestro majestuoso castillo medieval perdura y está presente la esencia del Rey Sabio, un enamorado de la cultura, como tú. Estoy seguro de que, junto a esa esencia, ahora permanecerá la tuya por siempre.
Lorca es una ciudad agradecida, y espero que cuando la situación lo permita, sepa estar a la altura y realizarte el homenaje que te mereces por tu generosidad sin límites, y por estar siempre dispuesto cuando alguien llamaba a tu puerta para que hicieras lo que mejor sabías: actuar, contar un cuento, presentar una gala. Lorca te lo debe.
Una de las personas que más te han querido, ha dicho estos días que te has ido porque había demasiado silencio en las calles para un cuentacuentos. A partir de ahora tienes mucho trabajo, Raúl, en el cielo hay muchos niños a los que tienes que hacer felices, pero no te olvides de cuidarnos a los que aquí abajo lloramos tu ausencia.
In Memoriam de Raúl Rey, que nos dejó el pasado 28 de enero.