Preocupante situación para el sector agrícola
Las consecuencias del paro en el sector agrario comarcal pueden llegar “a ser dramáticas si los huelguistas prosiguen su actitud de bloqueo de la actividad de exportación”, señalaba Joaquín Roldán, presidente de Coag Águilas.
“Esto es un desastre, no podemos sacar el género de las cámaras”, anunciaba. Roldán informaba además sobre las enormes pérdidas que para el sector de la agricultura están suponiendo estos días de huelga nacional. Pérdidas y preocupación también para la ganadería. Las reservas de pienso se han agotado, aunque ayer se autorizó el suministro mínimo en granjas, según comunicó Manuel Soler, presidente de Alimer, cooperativa dedicada a la agricultura, ganadería, fabricación de queso, conserva de alimentos y manipulación de flores y frutas.
“Estamos seriamente preocupados. Ahora que parecía que los precios del cerdo estaban recuperándose, nos viene esta huelga. Nos encontramos en plena campaña de recogida de fruta, y lo único que vemos es cómo se acaba pudriendo en las cámaras frigoríficas”, apunta Soler. Esta grave situación necesita, según sus palabras, un rápido entendimiento entre los sindicatos y gobierno para desbloquear un asunto que está suponiendo enormes quebraderos de cabeza. Añadió que la campaña de recogida de sandías “está paralizada”, en un momento en el que “se ha acelerado el proceso de maduración de los frutos”.
José Martínez, presidente de Asaja Águilas también considera lamentable esta situación. “Los agricultores están llevando los productos a las cooperativas, donde las hortalizas y frutas crecen como montañas, sin que les podamos dar salida”, comenta, al tiempo que advierte que si no se le encuentra pronto solución y se adopten medidas idóneas las pérdidas serán catastróficas.
Otro de los efectos colaterales del paro del sector transportes en el sector ganadero es “que no se pueden trasladar animales a los mataderos para su sacrificio y que hay muchas granjas que necesitan derivar animales de granjas de cría a cebaderos de engorde y no pueden hacerlo”.
Organizaciones como COAG se movilizarán esta tarde, enfrentándose a los piquetes, en puntos como Lorca, Cartagena y Murcia “para poder llevar el pienso al ganado y a sus explotaciones».
La pesca, otro de los grandes perjudicados
“Ni lubinas, ni doradas, ni pescado de ningún tipo”. La Plaza de Abastos, los pequeños comercios y los supermercados han visto cómo en pocos días las piezas de pescado y marisco aguileño se esfumaban. “Ahora la gente se ve obligada a adquirir congelados y otros productos”, indicaba la dependienta de uno de los comercios de Águilas.
La situación se repetirá en los días siguientes pues el sector pesquero continúa en huelga indefinida desde la pasada semana, en protesta por los elevados precios de los carburantes. La Cofradía de Pescadores de Águilas lleva desde el jueves pasado sin faenar y, por lo pronto, no tienen pensado reiniciar su actividad. En conversaciones con La Actualidad, Francisco Gómez, el patrón mayor, informaba sobre la reunión que en la tarde de ayer mantuvieron los pescadores para valorar la situación actual y determinar si continuaban o no con el paro. “Lo más probable es que la huelga prosiga mañana viernes”, aseguraba Gómez.
Por lo pronto, la histeria y tensión entre los sectores sociales continúa en alza. Desde el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Águilas, la edil de Consumo, Ana Miñarro advierte que es una situación que se veía venir y sobre la que el gobierno central debería haber tomado algún tipo de medida, en lugar de dar la espalda a esta palpable crisis. Su homónima en Lorca, Antonia López, subrayaba que lo más desconcertante para la ciudadanía es no tener noticias sobre cuánto tiempo podría prologarse la huelga. “Esta situación está provocando muchas bajas laborales. Los trabajadores aún no saben cuándo podrán regresar a sus puestos de trabajo, tampoco lo saben sus propios jefes”.
