“El problema agrícola es que la distribución domina a la producción ”

Diego Díaz Rubio, responsable del Departamento Comercial de ExpoÁguilas, realiza para La Actualidad un balance de la actual situación del sector agrícola, al tiempo que expresa su incertidumbre sobre la campaña que ahora comienza.

Pregunta.- ¿Cómo resultó la pasada campaña agrícola?
Respuesta.- La campaña 08-09 en Águilas tuvo dos partes. La primera, de septiembre a diciembre, que fue buena; y la segunda, desde enero hasta mayo, que ha sido desastrosa. Con la cual, realizando un balance de ambas, podríamos decir que ha sido un año en blanco porque lo que se ganó al principio se perdió al final. Ante esta situación, las empresas y muchos agricultores se encuentran ante la necesidad de un dinero que los bancos ahora mismo no dan.

P.- ¿Y cómo son las perspectivas para la que comienza?
R.- Si empezamos mal y seguimos mal durante todo el año si que nos encontraremos con un problema, aunque también es cierto que llevamos muy poco tiempo de recolección y aún no se puede hacer ningún balance. Lo único que podemos estimar es que ahora mismo, con la parada que está la demanda en España, la exportación es lo único que nos puede salvar. Pero claro, también está el problema de que los paises de fuera, aunque estén remontando, siguen obsesionados con no gastar y eso va a influir mucho en esta campaña. Además, si el clima no ayuda para que la producción vaya saliendo escalonada vamos a tener un gran problema. En el momento en el que se junte mercancía los precios se van a venir abajo porque, este es un problema que arrastramos desde hace años, la distribución domina a la producción. El año pasado fue buena precisamente por eso, porque entró el frío temprano, la lechuga y el tomate aguantó y no hubo sobreproducción.

P.- ¿Cuál es el problema actual de la agricultura?
R.- El problema no es uno, son varios. La producción no se ha aumentado, en Águilas, en los últimos años y aún así la distribución continúa dominando a la producción. Además, se deja entrar desde terceros países mercancía sin ningún tipo de control y, en definitiva, la distribución es la que aprovecha todas esas circunstancias para que a los productores no les llegue el precio que los consumidores están pagando. Porque cualquier producto perecedero al consumidor le cuesta muy caro pero al que lo produce no les llega ni el 10% de ese precio. Los canales de distribución están mandado más que los Estados.

P.- En los últimos años se están retirando del sector, aproximadamente, un 4% de los agricultores, ¿se mantendrá esa tendencia?
R.-En mi opinión hay dos tipos de agricultores, por un lado el individual y por otro las empresas del sector. Hoy en día los que más se están dando de baja son los pequeños agricultores que, desgraciadamente, seguirán abandonando ya que no encuentran el necesario relevo generaciones. Por otro lado, en lo referente a las empresas agrarias, quienes sepan hacer bien los deberes y se posicionen bien dentro de las estructuras de comercialización y distribución no creo que tengan ningún problema.

P.- ¿Desaladoras sí o no?
R.- Desaladoras yo creo que se han hecho por ideas políticas. Lógicamente, lo más sano y natural es regar con el agua que proporciona la naturaleza pero aquí desgraciadamente no contamos con ella. No obstante en otros paises, California o Francia por ejemplo, donde no se ha hecho tanto política sobre el agua se hacen trasvases. Aquí nos hemos visto obligados a tener desaladoras si queríamos regar porque nadie ha querido hacer un trasvase o la gente, por ideas políticas, la gente no se ha puesto de acuerdo. Entonces, las desaladoras sí, siempre que ayuden a que la economía de los pueblos no se vayan abajo porque de lo que sí estoy convencido es de que si en este pueblo no hubiésemos tenido desaladoras la crisis sería bestial porque ni habría campo, ni turismo, ni construcción, ni industria…

P.- Actualmente tenemos dos desaladoras en Águilas, funcionando al 50%, ¿realmente es necesaria la de Águilas-Guadalentín?
R.- Bueno, las desaladoras que tenemos en Águilas, dependiendo de la época del año, están al 50% o al 100% porque los consumos no son los mismos. La desaladora que está construyendo el estado, de 70 hectómetros, posiblemente, si tenemos unos años fuertes de sequía, hará falta… No obstante, sobre esa desaladora, considero que debería haberse hecho de otra forma, no ese monstruo tan grande. Creo que lo ideal hubiese sido una construcción en fases en función de las necesidades porque ahora mismo no hay demanda y, además, la desaladora se terminará y, posiblemente, este un año sin funcionar por falta de fluido eléctrico.

P.- ¿Está respaldada la agricultura por el Gobierno?
R.- Más que por el Gobierno está respaldada por las estructuras que tiene creadas la Unión Europea pero, al margen de este asunto, el Gobierno debería de luchar para que la agricultura española se posicione y no tenga tanta competencia desleal. Esa es para mi la única falta que tiene la administración española: que nos defienden poco ante Europa.

P.- ¿Existe en un futuro la posibilidad de introducir nuevos cultivos en el campo de Águilas?
R.- Yo creo que el clima de Águilas y el agua de Águilas debe aplicarse a lo que conocemos pero no porque no se pueda cultivar otra cosa sino porque nuestras condiciones climatológicas permiten que el tomate y la lechuga se cultiven en nuestra localidad cuando en otros lugares es imposible. Además, traer a Águilas productos que ya se comercializan en otras zonas supondría entrar en competencia con otros productores y eso se notaría en la rentabilidad.
Nuestra campaña tiene que ser la de invierno, y en invierno aquí solo se puede producir tomate y no debemos calentarnos la cabeza con otras cosas.

P.- Mucha gente hablaba de que la agricultura desaparecería a favor de la construcción, sin embargo se ha invertido esta visión y la agricultura vuelve a sostener la economía local, ¿qué opina?
R.- No es que vuelve a mantener, es que la agricultura siempre ha mantenido la economía local. En la época de auge de la construcción, la economía estaba más viva, los sueldos eran mayores y muchos se dejaban el sector agrícola pero hoy en día se están viendo obligados a volver. Es el sector que siempre nos ha mantenido y espero que siga siéndolo, teniendo en cuenta sobre todo la crisis mundial que vivimos. Creo que Águilas debe dedicarse a la agricultura y el turismo, entendido como hoteles e infraestructuras, y no a la construcción.

P.- Un titular que resuma la situación agrícola actual en la localidad podría ser…
R.- Comienza una campaña marcada por la incertidumbre.