Los desfiles de Carnaval llenan de color y fantasía las calles de Águilas

Un total de 37 peñas lograron desfilar pese al frío y la amenaza de lluvia

Imagen de la peña Ipanema

En la imagen la peña Ipanema.

Los desfiles de Carnaval son, sin duda, uno de los momentos más esperados por todos los aguileños y visitantes, al mismo tiempo que es el lugar para que las peñas de Carnaval, tras meses de trabajo, puedan enseñar a los aguileños y visitantes el resultado de tan ardua tarea. Un total de 37 peñas salieron ayer a la calle llenando de color, magia y fantasía toda la localidad .

Pese al frío, el aire y las amenazas de lluvia las peñas pudieron finalmente llenar las calles y mostrar a todos el impresionante resultado de su trabajo. Las continuas miradas al cielo fueron la nota dominante durante la jornada matutina y las sonrisas por haber logrado vencer a la climatología las de la tarde.

El derroche de elegancia quedó patente en las coreografías

El Ballet Oficial de la Federación de Peñas, con un favorecedor diseño azul turquesa, fue el encargado de abrir el tan esperado desfile. Tras él, la Musa, Cati Ayala, sobre una gran carroza y dentro de un espectacular traje en color plata enamoró a todos cuantos la observaban derrochando simpatía, bailando y animando a todos los carnavaleros y carnavaleras. Como no podía ser de otra manera, tras la magia y la inspiración de este personaje, su peña, «Basel» que decidió acompañarla con un disfraz muy acorde con el de la gran reina de estos Carnavales.

A continuación, hacían su aparición los individuales que, como cada año, lucieron originalidad entre los asistentes, Bárbara Rey acompañada de Ángel Cristo, “El Popeye”, que como todos los años no faltó a la cita carnavalera, o Merche, con un original diseño que representaba al infierno.

Los formaciones infantiles no se quedaron atrás, demostrando que el Carnaval tiene cantera para muchos años. Numerosas peñas de baile infantiles llenaron las calles, dejando patente que estos pequeños bailarines tiene madera de artistas, algo que se vio recompensado por los numerosos aplausos del público.

El derroche de elegancia quedó patente en las coreografías. Un año más las peñas de baile llenaron de arte el desfile, ejemplos como la peña “Ipanema” que volvió a derrochar espectacularidad con su peculiar visión de “El Fantasma de la Opera”, o “Serpentina” con una magnífica coreografía acompañada de espectaculares sonidos orientales.

Las peñas cómicas y críticas llenaron de carcajadas la avenida Juan Carlos I, destacando “La Rata Loca” que acompañado del sonido de las gaitas desfilaron parodiando el nacimiento de la infanta Leonor y realizando de forma divertida pero sin obviar ningún detalle un tradicional baile asturiano. Una crítica sobre “campos de golf y lechugas” fue la premisa escogida este año por “El Roncaor”. Por supuesto tampoco faltó “La Clanka” que, como todos los años, fue la peña más numerosa y que fue la encargada de escoltar a Doña Cuaresma que, como no podía ser de otra manera, desfiló de riguroso negro.

Don Carnal y la Mussona tampoco faltaron a los desfiles y con su peña “Cáucaso” volvieron a lucir espectaculares y voluminosas espalderas llenas de plumas que, sin lugar a dudas, pusieron el toque glamuroso del desfile.

Un año más, Águilas logró brillar con luz propia llenando de aromas de Carnaval el ambiente y demostrando la calidad de estas fiestas declaradas de Interés Turístico Nacional.

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